Dolores, una rica hacendada de la serranía cordobesa, está enamorada del Sargento Sáez, del puesto de la Guardia Civil. Aprovechando la ausencia de Dolores, la hermana gemela de ésta la mantienen encerrada en el sótano del cortijo. Junto con el administrador de la finca y el hijo del alcalde, montan un negocio de falsificación de dinero.